En estado limitado del ser, o estado dormido, funcionamos desde los límites del ego, es un bajo estado de consciencia, de confusión, de poca luz o poca claridad. Por eso en distintas tradiciones se habla de la luz, del despertar, o de distintas metáforas que hacen referencia a elevar la consciencia y salir de ese estado.
La diferencia entre religiosidad y espiritualidad, es que la primera se trata de creencias, mientras que la segunda se trata de experiencias, de una búsqueda de experiencias de conexión con el propio ser, de estar en contacto de primera fuente con las distintas experiencias de la consciencia, del alma y del espíritu. Esa es la diferencia entre fe ciega, fe muerta, y la fe que es certeza y que nace de las propias vivencias.
En psicoterapia, muchas/os psicólogas/os hablan en exceso a sus pacientes de distintas teorías, que es un mal de muchos psicólogas/os, que es el educar al paciente con información racional sobre la psicología, en teorías y explicaciones sobre sus problemas y sobre las soluciones. Desde este enfoque más que hablar de teorías sobre el problema o solución, que también podría ser una parte o porcentaje menor de la psicoterapia, lo que se hace es ofrecer vivencias, experiencias, hacer entrar a la persona que está en el rol de paciente en estados de consciencia que le permita acceder a los recursos internos (dentro de sí misma/o) para diseñar las mejores soluciones a su problema particular, sea cual sea.
El reciente fallecido Claudio Naranjo (1932-2019), psiquiatra chileno, uno de los máximos referentes de la Psicología Transpersonal a nivel mundial, realizó una vasta investigación teórica y práctica durante toda la búsqueda de su vida sobre diferentes prácticas espirituales, chamánicas, religiosas y psicoterapias de toda la humanidad.
En su libro ‘Entre meditación y psicoterapia’, del 2011, da
cuenta de la síntesis representada en este esquema que acá presento (de mi elaboración al leer este libro).
Las esferas envueltas en contorno rojo indican una polaridad del ámbito de lo conativo, la dimensión de la corporalidad, relacionada con el hacer.
- Un polo es el entrenarse en estados de CALMA, QUIETUD, PAZ, NO HACER, EL PLACER DE NO HACER NADA (DOLCE FAR NIENTE). Para esto existen múltiples prácticas aquietadoras de la mente, Shamanta budista; Raja yoga de patanjali, ejercicios de relajación; el sitting de Gurdjieff; las prácticas del no hacer y del quebrar rutinas enseñadas por el indio Don Juan a Carlos Castañeda.
- En el otro polo están los estados de ESPONTANEIDAD, ENTREGA, ABANDONO. Para esto existen prácticas como el tantra, principalmente su desarrollo de fenómenos pránicos; trance hipnótico distorsión del tiempo, regresión de edad; Trance Chamánico; Inspiración Mística Cristiana; Imaginación Activa de Jung; Estados de Sabiduría Organísmica de la Gestalt; Asociación Libre de Freud; Libertad Vegetativa de Reich; Espontaneidad y Creatividad del Psicodrama de Moreno.
Tanto el dejar de hacer como el no obstruir lo que viene de adentro, son estados de no hacer, en el sentido que son estados de no ego, donde puede accederse a estados de expansión de consciencia. Se aprende a dejar ir, soltar el control mental, lograr cierta pasividad en el ego, para que las fuerzas esenciales activas se hagan presentes.
Las esferas envueltas en contorno azul celeste indican la polaridad del ámbito afectivo, emocional, del corazón, de la función del sentir.
- Por un lado está el desarrollo de estados de AMOR y COMPASIÓN. Donde se produce un desarrollo de la humanización- humanidad, empatía, sentimiento de unidad desde la ampliación de la consciencia afectiva. Acá existen múltiples prácticas espirituales de compasión y amor en el budismo y el cristianismo, de perdón, servicio, solidaridad y altruismo. Las meditaciones interpersonales experimentadas y desarrolladas por Claudio Naranjo; las terapias de encuentro y conexión humana del área humanista; la aceptación total incondicional Rogeriana; los ejercicios de afectividad y ternura de biodanza de Rolando Toro; las meditaciones con la naturaleza, árboles, la tierra, etc. Las meditaciones para la Consciencia de la Abundancia. Meditaciones budistas de interdependencia de todo lo vivo.
- En el otro polo de la afectividad están los estados de DESAPEGO, RENUNCIA, fortaleciendo la capacidad de libertad, de autoobservación, liberarse de egoísmos propios y ajenos. Ejercicios de desapego, renuncia y sacrificio del cristianismo; ejercicios hinduistas de la neutralidad trascendente, la extinción de pasiones y la indiferencia cósmica; ejercicios budistas de renuncia, desidentificación emocional, consciencia de lo efímero y ecuanimidad. Ejercicios de Gurdjieff de desidentificación de lo personal, desdoblamiento, autoobservación, ejercicio del Stop, experiencias de la propia 'nadidad'. Meditaciones del budismo zen sobre el silencio, la muerte y el vacío.
Las esferas envueltas en contorno amarillo, polaridad del ámbito cognitivo, de la función del pensar.
- En un polo tenemos la concentración en lo DIVINO. Desarrollo de estados perceptivos profundos de la propia SACRALIDAD y lo SAGRADO de la vida, percepción de lo sagrado, estado de sentir lo TRASCENDENTE, capacidad de INTERIORIDAD. Rezos, oraciones, mantras, concentración en objetos sagrados, santos, dioses, diosas, la madre divina, el padre celestial, o en cualidades de dios o aspectos simbólicos de dios, o dioses, los planetas o constelaciones; concentración en valores abstractos filosóficos, o en imágenes simples, naturales o abstractas. Uso de la imaginación y visualizaciones creativas; nivel avanzado de relajación autógena con imágenes.
- En el otro polo de lo cognitivo está el desarrollar estados de DESPERTAR, de Concentración en el AQUÍ y AHORA, estado de PRESENCIA, de estar en el PRESENTE. Aquí está presente el desarrollo de la claridad, presencia, atención plena, estar vivo, sentir el propio cuerpo y habitarlo, despertar, conectarse consigo y con el mundo externo material. Muchas prácticas nos pueden ayudar como el budismo vietnamita, el Focusing, Gestalt, Mindfulness, masajes. Todos ejercicios para fortalecer la atención en nuestro cuerpo, nuestros 5 sentidos, nuestra respiración, y sensaciones. La práctica de realizar 'una sola cosa a la vez', 'concentración plena en lo que se hace', ejercicio de llevar la atención conciencia de lo cotidiano, práctica de estar en el presente, en el aquí y ahora.
No hay comentarios:
Publicar un comentario